sábado

San José y el gatito


Durante la Segunda Guerra Mundial, unas hermanas polacas dirigían un orfanato en Varsovia.
La población era muy pobre y estas hermanas vivían de la Divina Providencia.Pero un día la leche empezó a faltar, lo que representaba una grave amenaza para la salud de los huérfanos.¿ Qué hacer ? Ante la alarmante situación, la madre superiora le pidió a la cocinera, sor Ewa, que escribiera una petición a San José y que la colocara detrás de su imagen, siguiendo la costumbre la la Comunidad. Pero ante la hoja en blanco, sor Ewa se preguntaba cómo representar la leche, tan blanca como el papel. Sin embargo,se las arregla como puede.
A la mañana siguiente, un hombre de la ciudad golpea a la puerta del convento. Quiere saludar a las hermanas y les trae un regalo.¡ Estas se alegran pensando que tal vez se trate de la leche que llega ! Pero su sorpresa es tan grande como su decepción al ver que el visitante les regala simplemente un gato, un simple gatito... ¡ Extraño regalo! El visitante les pregunta:
-¿ Necesitan algo en particular ?
- Sí, leche sobre todo,- responden las hermanas a una sola voz.
-¿ Leche ?- exclama el visitante,-¡ pero tengo mucha ! ¡ Se la traigo cuanto antes !
La leche les llega el mismo día. Pero la superiora queda intrigada por el asunto del gato... Le pide a la cocinera que le muestre la petición que le ha elevado a San José. Al ver el dibujo, estalla en risas. En efecto, ¡ Sor Ewa había dibujado un gato que bebía a grandes lenguetazos en su recipiente !
En su bondad, San José había cumplido: ¡ primero había provisto el gato y luego, de yapa, la leche!